La lluvia, aunque es natural y refrescante, puede causar ciertos problemas en el agua de tu piscina. Desde un aumento en la turbiedad hasta un desbalance en los químicos, es importante que sepamos cómo la lluvia afecta el agua y qué hacer para mantener la piscina siempre en óptimas condiciones.
1. Cambios en el pH
Cuando llueve, el pH del agua de la piscina puede volverse más ácido. Esto ocurre porque el agua de lluvia tiene un pH más bajo que el de la piscina, lo cual desbalancea el agua y puede hacer que los productos químicos no funcionen correctamente.
Solución: Medición y ajuste del pH: Tras una lluvia, usa un kit de prueba para medir el pH. Si está por debajo del rango ideal (7.5), agrega soda cáustica para elevarlo.
2. Contaminantes en el agua
La lluvia puede arrastrar contaminantes como polvo, hojas, polen y otros desechos que terminan en la piscina. Estos contaminantes no solo ensucian el agua, sino que también pueden llevar microorganismos que afecten la salud.
Solución: Limpieza física y química: Usa la nasa para retirar cualquier basura visible, y luego aplica un tratamiento de hipercloración con cloro 70%. Esto ayudará a eliminar bacterias y otros microorganismos.
3. Baja en los niveles de cloro
La lluvia diluye los productos químicos de la piscina, especialmente el cloro, lo que reduce su capacidad para mantener el agua desinfectada. Este problema es común cuando la lluvia es intensa o prolongada.
Solución: Reajuste de cloro: Tras una lluvia fuerte, mide los niveles de cloro y ajusta si es necesario. Lo ideal es mantener el nivel de cloro entre 1 y 3 ppm (partes por millón). Agrega cloro 70% para lograr una desinfección eficiente.
4. Aumento de algas
La combinación de agua de lluvia y desechos puede fomentar el crecimiento de algas, especialmente si los niveles de cloro están bajos. Las algas pueden hacer que el agua se torne verde y que las paredes y el piso de la piscina se sientan resbaladizos.
Solución: Alguicida y cepillado: Añade un alguicida preventivo y cepilla las paredes y el fondo de la piscina para deshacerte de cualquier alga adherida. En caso de crecimiento severo, un tratamiento de hipercloración con cloro 70% también será efectivo.
5. Turbidez en el agua
El agua puede verse turbia debido a partículas en suspensión, especialmente cuando la lluvia trae polvo y otros materiales al agua. Esto afecta la claridad de la piscina y puede hacer que parezca sucia.
Solución: Uso de floculantes y filtro: Agrega un floculante para hacer que las partículas se agrupen y se hundan al fondo de la piscina, donde podrán ser aspiradas fácilmente después de 24 horas. Luego, asegúrate de filtrar bien el agua para devolverle su transparencia.
Consejos extra para mantener tu piscina impecable tras la Lluvia
1. Ajusta el pH a 7.0
2. Realiza hipercloración a 10 ppm con cloro 70%, deja desinfectar por mínimo 30 minutos.
3. Ajusta el pH a 7.5
4. Realiza floculación con sulfato de aluminio o PAC, recircular por máximo 1 hora
5. Después de 24 horas, realizar proceso de aspiración botando.
Con estos simples pasos, la lluvia dejará de ser un problema para tu piscina y tú podrás disfrutar de un agua limpia, segura y cristalina, ¡sin importar el clima!